Tenía tantas cosas en la cabeza, que era imposible ordenarlas, enumerarlas, citarlas, explicarlas, entenderlas... Prefería no hacerlo e intentar olvidar todo, pero también me resulta imposible.
Necesité una breve siesta al mediodía, luego el almuerzo, y un café, para afrontar con un poco más de huevos, no así claridad, la situación y asumirla, de todas maneras me encantaría no alargarla demasiado, ni darle importancia demás, pero sí intentar plasmar ciertas cosas, inmortalizarlas a través de la escritura. Pienso que ayuda bastante a resetear el disco rígido de nuestra memoria. Igual seguramente como siempre es una boludés mía más nomás jajaj. Boludo importante de hace décadas.
El querer afrontar la situación no implica claridad, las cosas siguen estando en una nebulosa en mi retina, mi cerebro, mi inconsciente. Pero eso sí, busco ordenar lo más importante para olvidarme de lo demás y quedarme solamente con lo positivo de la cuestión.
Alegremente, y en cierta forma tiene su parte alegre, lo único que me llena de contradicciones es el amor, el "amor", porque no estoy seguro de si ya tenga definición aceptable esa palabra, tampoco me pongo a pensar mucho si existe o no. Y cuando digo el "amor" me refiero a una piba nueva, una minita más que me mueve la estantería, que me desarma las jugadas y me patea el tablero de ajedrez, así yo no puedo jugar.
Me encanta la forma en que se detiene el tiempo cuando nos miramos, esa sonrisa que a veces no mostramos pero sentimos, y aunque tengamos los ojos fijos, los movemos dentro del otro, le decimos cosas, expresamos sentimientos que solo la otra persona decodifica, todo esto en una mirada. Logramos penetrar hasta el último nervio conectado a las pupilas del otro, sí, así de profundo nos miramos. Me encanta mirarle a los ojos, y a la vez no puedo sostenerle la mirada tanto tiempo, ella me gana, aguanta más, pero yo tengo cola de paja todavía. El mayor miedo que tengo es el de estar horriblemente equivocado y ser el único al que le pasan cosas, estar feamente equivocado en mi percepción. Yo con una mínima señal agarro viaje, apenas sepa que la pileta está cargada, me tiro de palomita. Igual tanto tiempo de intimidad no tuvimos, apenas nos estamos conociendo, he ahí el dilema. Y he ahí la esperanza.
Atendiendo lo relativo del tiempo, no es necesario precisar hace cuanto nos vemos exactamente, pero hace poco, y cada vez más. Nos conocimos gracias a un tercero y se armó un grupo de "amistad" donde cada vez nos relacionamos y vemos más.
El dilema es que, no puedo precisar en qué momento exactamente se metió tan dentro mío, que tramposa que es, que me habla desde dentro mío y así no se puede. No sé en que momento la dejé pasar a mi interior, a mi inconsciente, aunque sí sé que desde la primera vez que la vi, me enamoré. Y no es puro verso, si querés quitale el enamoramiento, pero desde la primera vez que la vi, empecé a sentir cosas, y cada vez más fuertes.
Quedo totalmente boludo viéndola cuando habla, escuchándola como quien no quiere la cosa, tanta claridad para expresar y entender las cosas de este mundo, tan superada, tanta sabiduría. Es linda? Boludo, te juro que no. No. No es linda. Bah, lo que se conoce comúnmente como "linda"; no es "linda" de cara, ni tiene "buen" cuerpo. Ojo, no significa que esté fea, sino para mí todo lo contrario. Encuentro en ella la más pura belleza, la belleza total, y cuando me sonríe un chiste mío, me desarma como creo que nunca antes me pasó. Es tan atractiva, me atrae tanto, es tan lo que me falta, lo que me gusta. Y eso que a mi alrededor tengo minas muy lindas con las que podría avanzar, pero estoy re enganchado con ella, quiero intentar con ella, hoy solo quiero tener una oportunidad con ella. Solo pienso en ella, y como no siempre encuentro respuesta, me gustaría no pensar tanto.
Ya estuve a solas con ella una vez, hace un par de días, pero quise hacer "buena letra" (no sé si no me arrepiento) y aproveché el tiempo juntos para hablar y conocernos, con las ganas que tenía de partirle la boca de un beso. Es lo malo de ser un chanta o querer jugar con la psicológica, conlleva mucha paciencia y trabajo lento, y lo que me gustaría ahora es acelerar las cosas, debería cambiar la estrategia.
Intenté disimular mi interés hacia ella, y creo que me fue bien. Intenté dar una buena primera impresión, de alguien tranquilo con buena onda. No quería zarparme en la primera. Pero acá entre nosotros, te juro que la próxima oportunidad que tenga no la voy a desaprovechar. La buena letra ya la hice, ahora no me importa nada más, pondré toda la carne al asador y así ya sabré que es lo que realmente pasa con ella. Siempre pienso que "jugando al borrego te van a carnear". Yo sé. Solo quiero asegurarme de que del otro lado también pasan cosas, para avanzar. No me gustaría para nada avanzar y que resulte que yo estaba equivocado/confundido.
Y es ese el dilema, que no sé que cosas pasan dentro de ella, todavía no hablamos de lo que creo que nos pasa, tampoco se dio una buena ocasión, generalmente estuvimos siempre rodeados de otras personas, pero los demás como que sienten que pasa algo porque ya tiran indirectas de que nos demos un "pico" y cosas así. No sé si lo dicen jodiendo porque estamos juntos o porque realmente ven algo desde afuera, tendría que preguntarle a alguno, aunque eso significaría descubrir lo que siento yo, que por ahora está guardado.
Tuve la oportunidad de darle ese "pico", jugando, pero aflojé y solo le besé cerca de los labios, digo "solo" como una forma de decir porque pasaron días y todavía recuerdo perfectamente ese momento, como se detuvo el tiempo un instante, tampoco creo que me olvide nunca. Se me quedó grabado a fuego, fue demasiado.
Y así ando, flotando en una nube, queriendo descubrir que siente ella, queriendo volver a verla, todo el tiempo. Queriendo darle otros besos, hablar con ella, pasar el tiempo. No somos nada, no sabemos que le pasa a cada uno, y sin embargo la extraño tanto. Eso es lo malo.
Ya me dijeron que "el que no corre, vuela" y tendré que apurarme para descubrir que es lo que está pasando. "Habrá que desempolvar el disfraz de valiente y salir a tropezar" como dice el Piti Fernet.
Y yo sé que el barba me va a dar otra chance, otras chances, y tendré que aprovecharlas, no hacerme más el boludo, ni el tímido, ni el que quiere hacer buena letra. "Las minitas aman los payasos y la pasta de campeón" dice el Indio Solari, y esa es la actitud que debo tomar.
Estoy hasta las manos, lo sé, pero cada vez más decidido en descubrir la verdad. Pienso estar bien agazapado para notar la mínima señal y dar el siguiente paso.
Preparate piba, y tené cuidado en mirarme con esos ojazos y esa sonrisa que me destruye.